La actividad, que forma parte del proyecto de especialización del campus de Ourense, se celebró el jueves 13 y el viernes 14 de octubre en la Facultade de Dereito. El «IV Congreso Internacional da Auga«, con el lema Dereito e Auga no Horizonte 2030. Es una cita científica bianual que en esta ocasión se centró en el análisis de los recursos hídricos desde una perspectiva jurídica, reuniendo a especialistas estatales e internacionales en este campo procedentes de entidades públicas y personales.
Reigosa: «Tenemos en el agua una riqueza para el futuro muy importante»
En la inauguración, el rector, Manuel Reigosa, subrayó que se trata «de un congreso muy importante para el campus de Ourense, ya que ahora estamos involucrados en su acreditación como Campus Agua». Agradeció la implicación de la Facultade de Dereito, encargada de la organización, y de las áreas que imparten docencia, agradecimiento que también hizo extensible a las entidades públicas y privadas colaboradoras. El rector destacó el papel que el agua, como «bien imprescindible, de primera necesidad» pero también escaso, juega y jugará en el desarrollo de la humanidad. En este contexto, destacó la pertinencia de la temática elegida para esta cuarta edición del congreso del Campus Agua ya que, dijo, «el derecho tiene una importancia capital en el ámbito del agua, entendida como un derecho humano de primera necesidad, como algo que tenemos que repartir de manera justa». Igualmente, Reigosa apuntó lo apropiado de vincular el programa con la Agenda 2030 «porque probablemente uno de los problemas que va a tener la humanidad más acuciantes durante las próximas décadas tiene que ver con el agua, con su escasez y contaminación». Siendo conscientes de que en Galicia «tenemos en el agua una riqueza para el futuro muy importante».
Marta Fernández, decana de la Facultade de Dereito, añadió que esta celebración supone un hito «importante, significativo, para nuestra facultad y para nuestro campus». Este cuarto congreso, indicó, «pretende ofrecer (en la línea de los tres congresos anteriores, organizados por otras facultades del campus con periodicidad bianual) un punto de encuentro entre expertos de distintos ámbitos para debatir sobre agua, medio ambiente y sostenibilidad». La responsable académica recordó que el agua, «recurso natural de primera necesidad y de importancia mundial, define el campus de Ourense como Campus Agua» y este congreso pretende abordarla de manera inter y multidisciplinar, contando con la participación de 12 especialistas internacionales, investigadores, profesionales y técnicos, y la asistencia de 60 personas. En este sentido, subrayó la necesidad de analizar la eficiencia y sostenibilidad de la gestión del agua desde el prisma del derecho, recordando los problemas jurídicos que deben afrontar los proyectos e iniciativas públicas y personales en este campo.
Por su parte, César Fernández, vicepresidente segundo de la Deputación de Ourense, y Armando Ojea, teniente alcalde del Concello de Ourense, recordaron las problemáticas relacionadas con la escasez de agua que ya afrontan las administraciones y mostraron su deseo de que este tipo de iniciativas contribuyan a «mejorar la eficiencia en la gestión de estos recursos». Además, Javier Puertas, director jurídico de Viaqua, apuntó la importancia en este sentido de la colaboración público-privada. Al acto de inauguración también asistieron Elena Rivo, vicerrectora del campus de Ourense; Susana Reboreda, vicerrectora de Extensión Universitaria; responsables de centros del campus de Ourense y el director del Campus Agua, Roberto Ignacio Fernández.
Acceso al agua y al saneamiento, derechos básicos para una vida digna
El IV Congreso Internacional del agua aborda retos específicos de la gobernanza del agua en el marco de los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030. Concretamente, la programación se estructuró en dos sesiones, con intervenciones centrales de 12 especialistas estatales e internacionales, seguidas de deliberaciones, debates y comunicaciones alrededor de tres paneles temáticos, como son el derecho al agua; agua y sostenibilidad y gestión del agua. A lo largo de las sesiones se trataron temas como el acceso al agua y el saneamiento como derechos indispensables para una vida humana digna, medidas para combatir la contaminación y el calentamiento global, la gestión sostenible del agua, sus usos y buenas prácticas, la planificación hidrográfica o la fiscalidad. Para hablar de estas cuestiones, las conferencias del congreso corrieron a cargo de especialistas de diferentes universidades estatales, como las de Valladolid, Murcia, Elche, Barcelona, País Vasco, Tarragona y Zaragoza, además de la UVigo, y de la University of Strathcly de Glasgow y del World Bank.
La conferencia inaugural, titulada Aguas subterráneas: un recurso natural invisible pero necesario en tiempos de emergencias climáticas, fue ofrecida por Francesco Sindico, catedrático de Derecho Internacional en la facultad de derecho de la Universidad de Strathclyde (Glasgow, Reino Unido) y director de Climate Change Litigation Initiative (C2LI). En su presentación Laura Movilla, profesora de Derecitoo Internacional Público de la Universidade de Vigo, subrayó del ponente que «es un experto internacional en ordenamiento de aguas», colaborando activamente con la Unesco y siendo asesor jurídico en controversias internacionales sobre la temática de las aguas subterráneas, aguas que representan alrededor del 97% del agua dulce del planeta y son fundamentales para el abastecimiento de la población mundial y de los ecosistemas.
Francesco Sindico habló de «aguas subterráneas en tiempos de emergencia climática», presentado al público la relación entre ambos factores. «La relación es tanto física cómo jurídica. A nivel científico se necesita entender mejor los efectos del cambio climático sobre la calidad y cantidad de agua en general y de agua subterráneo en particular», dijo. Sin embargo, añadió el experto, «también se precisa entender mejor que el agua subterráneo y su gestión sostenible tiene un valor muy importante para la adaptación al cambio climático». El catedrático delineou el marco normativo internacional del cambio climático y de las aguas subterráneas afirmando que «ahí lo que vemos es que hay una descoordinación a nivel internacional: hay muchas iniciativas, muchos tratados internacionales, vinculantes, no vinculantes, pero a menudo, no se hablan entre ellos. Se precisa una coordinación mayor». A nivel nacional, añadió, «lo que se precisan son medidas claras, leyes informadas por la ciencia, por la participación pública, y que tengan un sistema de resolución de controversias que permita tanto al usuario del agua como al proveedor del agua tener certeza, que permita inversiones y que permita al usuario estar seguro de recibir la cantidad y la calidad correcta de agua». Durante su conferencia también habló sobre tendencias jurídicas en el tema abordado, poniendo el foco en temas como la dotación de personalidad jurídica la estos recursos, citando el caso en España del Mar Menor.